Divina proporcion 1

 Concepción Melero

Buscando desvelar el misterio que encierra la Divina Proporción, Jaime Buhigas ha conducido al publico de la filial de Alicante, a través de un recorrido por del hilo de la historia, acompañado de importantes filósofos, teólogos, geómetras, matemáticos y científicos de la talla de Platón, Eurípides, Pitágoras, (...)

Nicómaco de Jerasa o San Isidoro de Sevilla, entre otros.

El arquitecto, escritor, docente y dramaturgo, despertó un gran interés con sus reflexiones, interrogantes y demostraciones.

-“¿Hay geometría que no sea sagrada?” –Plantea.

Y desde ese interrogante explica, al estilo de los antiguos geómetras, la importancia de recuperar esa manera de pensar distinta, pues su objetivo consistía en buscar la unidad desvelando cómo se formaba la materia, a través de la poesía de las formas.

Jaime explica que es preciso entender las matemáticas cuantitativas, el cálculo que se enseña en las escuelas es únicamente una parte. ¿Qué buscamos con todo esto?

Si pretendemos entender lo que es la divina proporción, el número de oro, hay que empezar por preguntarse: ¿Qué es el número, pues? ¿Una cantidad? ¿Una cifra?...

Jaime está de acuerdo con Platón al afirmar que el número es “una idea… pero ¿Idea de qué? Para entenderlo, hemos de desarrollar un tipo de pensamiento muy particular que está en desuso, para comprender el lenguaje poético, metafórico, simbólico y trascendente, sin el cual será un simple entrenamiento intelectual”.

La geometría se entendía como una materia que relacionaba todas las ramas del conocimiento. Nace en un entorno espiritual y religioso. Los geómetras, los que median la tierra, pertenecían a una orden sacerdotal en torno a la ciudad de Heliópolis, inspirados por el dios Toth, padre de la geometría, al cual adoraban  realizando importantes ritos.

En la ceremonia más famosa que se realizaba en Egipto, tras las crecidas del Nilo, la tierra quedaba cubierta del limo negro que fertilizaba la tierra y posibilitaba el desarrollo de las cosechas. Por este motivo, todos los años los sacerdotes geómetras tenían que volver a medir la tierra para darle a cada uno lo que le correspondía, pues se borraban los límites que la dividían… todo se convertía en una sola cosa y ahí encontramos el concepto del UNO, la UNIDAD primigenia y absoluta.

Solo determinadas personas que sabían medir y repartir justicia, calculaban las áreas. Aparece la primera función de la geometría, la JUSTICIA. Este rito duraba semanas… cantando, con inciensos y todo tipo de liturgias.

Venimos y vamos a la unidad. Todo empezó con una unidad y en la división de la unidad está la metáfora de la creación del mundo manifestado que conocemos. Es fácil deducir que si las galaxias se están separando, al retroceder en el tiempo todo estaba más cerca, formando una sola unidad de la que partió todo y se dividió en muchas otras… conformando la Creación.

Cosmos en griego significa orden. Por lo cual, la división de la unidad no se hizo de cualquier manera, se hizo con unos patrones… con unas dinámicas concretas… de forma ordenada y los geómetras buscaban averiguar los patrones a través de los cuales se divide la unidad. Así, a través de ese proceso se establece la clave para comprender como cambian las cosas y entender las leyes del Universo.

En los símbolos se esconden conceptos muy profundos cuando se busca desvelar qué subyace tras estos.

Por ejemplo ¿Qué vemos al contemplar un punto? ¿Vemos solo eso… un punto? ¿Qué es un folio en blanco?... es como el lienzo del artista, el marco donde pueden ocurrir los acontecimientos: La Nada, el Todo, la Eternidad, lo Absoluto, el CAOS según los griegos. Todas las teogonías plantean la misma cuestión: en el principio era el Caos, o Nun que era la denominación que le daban los Egipcios.

Erróneamente, se piensa que el caos es malo y el cosmos es mejor. En realidad, son realidades distintas ¿qué los diferencia?

Todo conocimiento desea aproximarse a la REALIDAD, y así comprender las leyes del Universo. ¿Hay una fórmula de cambio? ¿Una forma en la que se relacionan las cosas?... y aparece otro concepto a destacar: el Logos, la forma en la que se relacionan las cosas. “El compás, como cuentan los antiguos, es la herramienta para conservar las relaciones y relacionar la medida“.

El punto es la manifestación del ser. El círculo es la manifestación de la divinidad. Cuando contemplaban los astros los antiguos, percibieron el poder del sol, que irradia su calor y su vida al sistema solar, el poder de la luna, que favorece la subida de las mareas, las mujeres paren con más frecuencia en luna llena y se preguntaban ¿qué es esto? Y ¿qué forma tiene?

Por lo cual, el entendimiento de la partición de la unidad y el regreso a ella, promueve la fusión con uno mismo, con los demás y con Dios. Como vías espirituales, trascendentes y religiosas como el Yoga, cuya raíz “yug” significa unión, o la Religión “religare”.

La unidad se divide, nuestra mente es dual: el cielo y la tierra. Del Caos (UNO) surgen Urano y Gea (DUALIDAD); Cielo y tierra, lo de arriba y lo de abajo, frío y calor, yin y yang.

El significado alegórico de las líneas rectas era la división. Los geómetras, encontraron el punto áureo en las rectas, la proporción áurea es la relación de tres elementos con el mismo logos que cumplen unas pautas como si fueran solo dos.

Y así se reconoció la belleza… la clave de la belleza, que no es subjetiva, sino objetiva, algo es bello cuando están proporcionadas sus relaciones, según los griegos y se puede encontrar en una estatua, un cuadro, una obra musical, un poema… y además se encuentran en la Naturaleza, el Universo, es el que lleva el canon del ser humano.

Y, con esta explicación tan sencilla, Jaime Buhigas asombró al público asistente y animó a seguir investigando en estas cuestiones tan profundas para abrir la mente al Orden Universal.